Terapia con MOTOmed letto2 - Unidad de Cuidados Intensivos en el Hospital “Chirec Delta” en Bruselas, Bélgica.
Además de médicos y enfermeras, también hay fisioterapeutas. Su trabajo es importante, también en la unidad de cuidados intensivos. La rehabilitación de algunos pacientes sobrevivientes al COVID-19 llevará mucho tiempo.
Manu Conchuela, fisioterapeuta en la unidad de cuidados intensivos del Hospital “Chirec Delta”, dice: “¡He estado trabajando en cuidados intensivos durante 30 años, nunca había visto una unidad tan llena de todos estos pacientes intubados en una condición tan grave! Dentro de unos días, los pacientes tendrán amiotrofia, que es cuando los músculos se están dañando. En una semana, los pacientes pierden el 20% de la masa muscular. ¡Es por eso que el movimiento es muy importante!”
La lucha contra COVID-19 será larga e incierta, debido a que la enfermedad también es nueva para todos los fisioterapeutas.
Una vez que la condición del paciente es estable, la movilización comienza y el tratamiento inicia tempranamente.
Oliver Bry, fisioterapeuta de la unidad de cuidados intensivos dice: “Muchos de los pacientes han tenido dificultades para respirar, y han tenido un reposo prolongado en cama en la unidad de cuidados intensivos. Todos tienen problemas con la debilidad muscular después de despertarse y nosotros, como fisioterapeutas, debemos intentar regenerarlos.”
Philippe Claes, jefe del departamento del Hospital “Chirec Delta”, dice: “Si tomamos las estadísticas relacionadas con el síndrome respiratorio de emergencias respiratorias, ¡sabemos que estos pacientes retendrán esa debilidad muscular durante un año e incluso hasta cinco años! El 49% de los pacientes regresan a trabajar después de un año. Después de escapar de la muerte, uno debe aprender a vivir de nuevo”
